María Bayón es reportera y guionista. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Navarra, y con un Postgrado en Relaciones Internacionales por la Universidad de Aberdeen, en el Reino Unido, su carrera le ha llevado a trabajar en prensa, radio y sobre todo televisión, dónde cuenta con una dilatada experiencia en actualidad política e investigación.
Aventurera y viajera nata ha recorrido medio mundo en busca de los protagonistas de la actualidad.
En 2014 un hecho cambió su vida: nació su primer sobrino, Nico. A él está dedicado este libro. Y en él ha volcado su gran ilusión, que Nico crezca con el libro como guía. Un tratado sobre el poder del amor y la fantasía, indispensable para fomentar los valores en los niños, e invitar a los adultos a ver el mundo a través de sus ojos.
¿Cómo surgió la idea de escribir "La Luna de Nico" y qué inspiró la creación de la historia?
La idea me la dio Nico, mi sobrino. Era hijo único y quería un hermano u hermana. El asunto es que cuando por fin, me anunció que iba a tenerlo, le pregunté: ¿Cómo lo has conseguido? Y me contestó muy serio que se lo había pedido a la estrellita, pero que había tardado mucho, porque había pasado toda la pandemia pidiéndoselo.
A partir de ahí, sumado a mi interés por la astronomía, surge la idea de La Luna de Nico, y su estrellita, que es Venus, la más brillante del cielo.
¿Qué papel jugó el nacimiento de tu sobrino Nico en la concepción del libro?
Bueno, es el protagonista. Nico ha jugado siempre un papel fundamental en mí. Verle crecer y ver el mundo a través de sus ojos es mi actividad favorita.
La historia utiliza la metáfora de los planetas para representar las emociones. ¿Cómo se te ocurrió esta conexión entre las emociones y la astronomía?
La ciencia de los astros tiene un lenguaje que ancla sus raíces en la historia de la humanidad, y particularmente en la mitología griega. Cada astro tiene una personalidad, una historia detrás que hemos interpretado los hombres. Por ejemplo, Mercurio se asocia a la comunicación porque era Hermes, el mensajero de los dioses, o Marte, el dios de la guerra, asociado a la impulsividad, los comienzos y tristemente, también los conflictos.
Mi idea es hacer una serie de libros que tengan como protagonista a Nico, y ahora a su hermana Paula, interaccionando de un modo u otro con todos los planetas del sistema solar. Dado que cada uno cuenta una historia, y ellos van a pasar por distintas emociones, me parece importante que la metáfora siga creciendo a su ritmo.
Mencionas que el libro es un tratado sobre el poder del amor y la fantasía. ¿Cómo esperas que este mensaje impacte a los niños y cómo invita a los adultos a ver el mundo de manera diferente?
La fuerza más grande del ser humano es el amor. Y la forma de amor que regalan los niños deberíamos tenerla siempre presente. Es incondicional, no juzga, observa, se maravilla o se disgusta, pero es transparente. Me gustaría invitar a todos los adultos, y por eso este libro, también va dedicado a ellos, a ponerse en el lugar del niño que fueron, el niño interior que siguen siendo, y salgan al mundo a mirarlo a través de sus ojos. Estoy segura de que encontrarán muchos tesoros escondidos.
¿De qué manera tu experiencia como aventurera y viajera influyó en la creación de los personajes y escenarios en el libro?
La vida es ya una gran aventura. Y la puedes disfrutar de muchas formas, pero quizá la más barata y asequible sea a través de la imaginación. Por eso, en este libro, que básicamente habla de valores, la imaginación es protagonista.
Creo que he querido transmitir a Nico la importancia de enfrentarse a la vida con curiosidad y valor, con alegría, con confianza y con respeto. Y en eso sí es cierto que han influido mucho mis viajes. Viajar, si quieres, es una forma de abrir la mente y dejarte sorprender por otros modos de vida.
¿Crees que "La Luna de Nico" puede tener un impacto duradero en la forma en que los niños perciben sus propias emociones y el mundo que los rodea?
Sí. Son valores universales que tarde o temprano tendrán que poner en práctica. Y son emociones a las que tendrán que enfrentarse. Recordar como lo hizo Nico, o cualquier niño, será siempre una herramienta para conseguir sacar el máximo partido de todas ellas. Además, he tenido la inmensa suerte de contar con una ilustradora genial, Alicia Nieto, capaz de plasmar con humor y fantasía mis mundos imaginarios, y por ende, los de Nico.
Para terminar la entrevista, cuéntame donde presentas el libro el día 15 de Diciembre.
Este viernes en Segovia, la tierra que me vio nacer. En la librería Antares, asunto que me hace especial ilusión porque allí me compré mi primer libro hace ya unos cuantos años.
Esta presentación es la primera, pero no la última.
El día 20 de enero, a las 12 estaré en La Casa del Libro del Barrio de Gracia en Barcelona, el 27 en Móstoles… en fin, son solo algunas, pero si no podéis asistir os recomiendo comprar el libro en la web de la editorial Apuleyo. Seguro que no os va a defraudar.